Estar Ahí (acerca de "Desde el Jardín", dirigida por Hal Ashby, basada en la novela de Jerzy Kosinski)


Trabajo realizado por Federico Kelly.


Chance Gardner vivió aislado en una casa toda su vida. Allí ha vivido cumpliendo la labor de jardinero y solo conoce el mundo a través de la televisión que tiene en su pieza.
El dueño de la mansión en la que vivía muere y debe abandonar la casa, con la sola herencia de la una valija y la ropa puesta del millonario fallecido . A partir de un pequeño accidente, es llevado a la casa de un empresario (por la mujer de este), y comienza a codearse con políticos y gente del mundo de los negocios.


Título en Castellano: Desde el Jardín
Título Original: Being There
Estados Unidos, 1979
Director: Hal Ashby
Actores: Peter Sellers; Shirley MacLaine; Jack Warden; Richard A. Dysart; Richard Basehart; Melvyn Douglas.

El presente trabajo intenta articular la película “Desde el Jardín” (basada en el libro homónimo de Jerzi Kosinski) y la teoría de Jerome Bruner, fundamentalmente a partir del texto “Realidad Mental y Mundos Posibles. Los actos de la imaginación que dan sentido a la experiencia”, tomando en cuenta algunos lineamientos e ideas surgidas durante la cursada del Seminario Psicología Cultural de la Facultad de Psicología de la U.N.L.P.


La Psicología Popular de Jerome Bruner

Bruner destaca que en todas las culturas existe una Psicología Popular, constituida por un conjunto de descripciones más o menos conexas sobre como “funcionan” los seres humanos, como es nuestra mente y la de los demás.

La Psicología Popular se constituye en un sistema que permite organizar la experiencia, el conocimiento y las diversas relaciones en el mundo social.
Los postulados de la Psicología Popular se podrían condensar en:
- La gente posee creencias y deseos.
- La existencia de un mundo fuera de nosotros que modifica la expresión de nuestros deseos y creencias.
- Se da por supuesto que la gente posee un conocimiento del mundo que adopta la forma de creencias y se supone que todos utilizan ese conocimiento a la hora de llevar a cabo cualquier programa de deseos o acciones.

Dice Bruner que las teorías populares de una cultura sobre la naturaleza humana, dan inevitablemente forma a como esa cultura conduce sus relaciones interpersonales.
La Psicología Popular propone explorar la emergencia de la intersubjetividad en nuestra especie humana. Para este autor, la Psicología debe aprender a comprender la sutil acción recíproca de la Biología y la Cultura. Desde siempre vivimos en la cultura, la cultura da forma a la mente.
Para Bruner debe adoptarse el criterio según el cual la actividad humana mental depende, para lograr su expresión plena, de estar vinculada a un conjunto de instrumentos culturales, por ello para estudiar la actividad mental se debe tomar en cuenta los instrumentos utilizados en esa actividad. Para intentar desarrollar el trabajo tomaré los siguientes conceptos:

Pensamiento Narrativo: como forma de otorgarle sentido a la realidad, y teniendo en cuenta que el sujeto significa con un esquema narrativo. El pensamiento narrativo consiste en contarse historias de uno a uno mismo y a los otros, construyendo un significado con el cual nuestras experiencias adquieren sentido. La construcción de significado surge de la narración, del continuo actualizar nuestra historia, de nuestra trama narrativa. En palabras de Bruner “Los actos de la imaginación dan sentido a la experiencia”. La narrativa se ocupa de las vicisitudes de la intención. Permite llegar a conclusiones sobre distintas perspectivas que pueden construirse para la experiencia se vuelva comprensible.

Presuposición: como intento de significar más de lo que se está diciendo, de penetrar más allá de la superficie del texto, o llenar el texto de significado.

Interpretación: La elección de una interpretación en lugar de otra, casi siempre tiene consecuencias reales en el tipo de relación que establecemos con los demás. Nuestra interpretación del personaje es el primer paso, y tal vez el más importante, de nuestra relación con el otro.

Según Bruner la modalidad narrativa se ocupa de las intenciones y acciones humanas, y de las vicisitudes y consecuencias que marcan su transcurso, por lo que a partir de ella estudiaré algunos diálogos que aparecen entre los protagonistas de la historia. Pondré como ejemplo dos diálogos:

Uno de los protagonistas, Ben (empresario) charla con el presidente sobre medidas económicas, con Gardner como invitado, y se produce el siguiente diálogo:
- Presidente: Sr. Gardner, ¿está de acuerdo con Ben, o piensa que se puede estimular el crecimiento con incentivos temporales?
Se produce un silencio…
- Chance: Mientras las raíces no estén muy lastimadas, todo está bien, y todo estará bien en el jardín.
Nuevo silencio
- Presidente: ¿en el jardín?
- Chance: Si.
Silencio (Ben mira extrañado)
- Chance: En un jardín el crecimiento tiene temporadas. Primero son la primavera y el verano, pero luego tentemos la primavera y el invierno, y luego tenemos la primavera y el verano otra vez
- Presidente: ¿Primavera y verano? (dice extrañado).
- Chance: Si.
- Presidente: Y otoño e invierno.
- Chance: Si.
(Se miran extrañados los otros dos)
- Ben: Creo que lo que nuestro joven amigo pensador está diciendo es que recibimos sin problemas a las inevitables temporadas de la naturaleza pero nos molestan las temporadas de nuestra economía.
- Chance: Si. En la primavera habrá crecimiento.
- Presidente: Debo admitirlo, es una de las declaraciones más optimistas que haya escuchado en mucho tiempo dice el presidente.
Ben aplaude
- Presidente: Admiro tu buen sentido. Es precisamente lo que nos hace falta en el gobierno dice el presidente.

En este ejemplo se puede ver como hay un intento de Ben por forzar el significado de lo dicho por Chance, al tratar de explicar lo que “en realidad” este quiere decir. Otro diálogo, cuando en una cena se sienta al lado del embajador de Rusia.

- Embajador de Rusia: Puede que se de cuenta, amigo, no estamos tan separados. No estamos tan separados. No lo estamos.
- Chance: No estamos tan separados. Nuestras sillas casi se tocan.
- Embajador de Rusia: Bravo (mientras rie y aplaude con su esposa).Nuestras sillas casi se tocan. Y queremos mantenernos sentados, ¿correcto? No queremos que nos la quiten, ¿correcto?. Porque si uno se cae, el otro también.
Luego le pregunta si ha leído fábulas de Krylob, y frente a los silencios de Chance, da por supuesto que lo ha hecho, y comienza a hablarle en ruso. Al continuar los silencios también supone que chance habla un ruso.

Aquí se puede observar como el embajador ruso otorga significado desde sus presuposiciones, a los silencios o repeticiones de Chance.

Bruner, al hablar de las obras literarias dice que en la manera de contar debe haber “desencadenantes” que suscitan respuestas. Asimismo marca 3 características del discurso que toma de Iser:

1 – El desencadenamiento de la presuposición, la creación de significados implícitos en lugar de significados explícitos.
2 – Subjetificación: la descripción de la realidad realizada no a través de un ojo omnisciente que ve una realidad atemporal, sino a través del filtro de la conciencia de los protagonistas de la historia.
3 – Perspectiva múltiple.

Los 3 juntos logran subjuntivizar la realidad.

Para Bruner la “subjuntivización” de la gran narrativa es un instrumento con el cual se crea no sólo el relato sino además un sentido de sus variantes contingentes e inciertas. En relación a las presuposiciones, el desencadenamiento de estas constituye, según el autor un medio fecundo de “significar más de lo que se está diciendo o de llenar el texto de significado”.

En los diálogos expuestos, se ve como frente a no comprender acabadamente lo que el interlocutor quiere significar, presuponen, otorgan significado, desde el propio sentido que ellos le otorgan. El otro termina funcionando a veces como mero estímulo para desencadenar nuevamente la respuesta, haciendo decir (en las interpretaciones del tipo “en realidad quiso decir”), lo que nosotros pensamos o quisiéramos oir.
El empleo de presuposiciones se ve facilitado enormemente por un “contrato” informal que rige los intercambios lingüísticos, dice Bruner. Normalmente suponemos que lo que alguien dice debe tener sentido, y cuando no resulte claro ese sentido, buscaremos o inventaremos una interpretación de la locución par darle sentido.